INOCENCIA PERDIDA
Donde llegó tu risa, llegaron tus sueños. No eres más que el aire que vaga sin rumbo hacia las costas. Sin miedo, tomas en tus manos las espinas y las vas dejando con el paso de tu alma por el tiempo. Como cenizas al viento, tu reino de espadas a colmado mi historia, llenando de esperanzas mi jungla y llevando en sus raíces una pequeña parte de mis huesos.
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Mientras tu vida comulga en mis agujeros, la otra parte de tu rostro se queda sin ideas mientras corres lentamente hacia la cúspide de tu vergüenza, pensando en desolación, clamando por aquello que quedo sembrado en el huerto de las esperanzas, donde arriesgaste tu inocencia por irte volando a la esquina sucia de aquella oscura ciudad.
Me encanto la ilustracion!
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